1999. Megu Umeno vive en un pueblo y piensa que es la única a la que le gusta jugar a videojuegos y dibujar, hasta que descubre que a Erika Wakamatsu, la delegada de su clase, también le gustan los videojuegos. Juntas empezarán a conocer a mucha más gente que comparte sus aficiones.
En la época de los routers y la super nintendo, Megu y sus amigos descubrirán uno de los grandes inventos de la época, que tan importante es ahora en nuestro día a día: Internet.